(Ansol).- Tras las extendidas elecciones en el Colegio de Abogados, se postergó el proceso de cramdown de Oil Combustibles, la petrolera por la que Cristóbal López le debe a Afip más de 10 mil millones de pesos, al jueves.

«Hasta ayer no había ningún inscripto.  Nosotros, como cooperativa charlamos con varios actores involucrados, pero nadie quiere participar porque hay una deuda posconcursal de 2 mil millones de pesos (por el no pago de impuestos a la transacción de combustibles) y una previa de al menos 8 mil millones. Nadie quiere meter las narices ahí porque habría que hacerse cargo de eso», contó Héctor Brizuela, el presidente de la cooperativa Petroleros Santafesinos, empresa social que conformaron los trabajadores de la planta de Oil Combustibles en San Lorenzo, provincia de Santa Fe, para mantener sus fuentes de trabajo, aun sin haber llegado a estar desempleados, .

Asimismo, le dejaron un escrito al juez Javier Cosentino explicando que quieren participar ante el eventual fracaso del cramdown, a través de la Ley de Quiebras.

En ese caso, la cooperativa tendría un rol fundamental: si la justicia acepta la quiebra, la empresa que continúa la producción no debería hacerse cargo de la deuda porque se liquidan los activos y se determina el monto del pasivo.

«La cooperativa, ahí sí, podría, con un plan sustentable, con mano de obra calificada y trabajando, podría pagarlo en 5 o 10 años. Con otros montos podríamos encararlo», explicó Brizuela.

Previendo esta situación desde hace un año, los trabajadores se organizaron de acuerdo a un plan de lucha que toma herramientas de la ley tras no haber conseguido que la Afip diera un plan de pagos que permitiera el desahogo de la empresa.

«El juez Javier Cosentino nos atendió muy bien, muy abiertamente, y le dijioms que los trabajadores no queremos ser mudos ni observadores. Tenemos la mano de obra calificada, sabemos cuidar la planta y nos preocupamos más que los empresarios: levantamos la mano con el tema ambiental y la mantuvimos en marcha», contó Brizuela, que también marcó que ellos podrían manejar la planta y la refinería, porque su fortaleza está en la mano de obra y la capacidad de gestión, pero supuso que no podrían hacerse cargo de las 200 estaciones de servicio.

Petroleros Santafesinos no sería la primera empresa petrolera recuperada, Decosur, del doque de Avellaneda, envió a dos trabajadores a contarles su experiencia y mostrarles que es posible.

Brizuela también mira las posibilidades para adelante: «La legislatura de Santa Fe aprobó un endeudamiento internacional de 6 mil millones de pesos para asfaltar los municipios de la provincia. Con semejante crédito cómo no vamos a poder poner en marcha la refinería y abastecer de asfalto, con trabajo santafesino».