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“Mientras fotografiaba, vi como la policía apuntaba directamente hacia mí”

(Ansol).- A raíz de las represiones sucedidas durante las movilizaciones contra la reforma previsional, finalmente aprobada por la Cámara de Diputados, ayer, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires y la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina, llevaron adelante una manifestación frente al Congreso nacional, bajo la consigna “Basta de disparar contra la prensa, exigimos garantías para el trabajo periodístico”.

“Con respecto a la represión, fue tanto a periodistas como al pueblo en general, y está relacionado con un modelo económico y político que cierra con represión. Ya hubo varios episodios en el último tiempo, en Jujuy, en la Patagonia y ahora en Capital Federal. Reprimir a la multitud de casi medio millón de personas tiene que ver con generar miedo, y a la vez, se llevó a cabo con un protocolo ilegal, que tenía que ver con disparar a la cara, y por eso, tantos heridos en los ojos”, dijo a Ansol el periodista de la cooperativa Radio Gráfica, Lucas Molinari, quien recibió un balazo de goma en el rostro.

En este marco, los gremios denunciaron que en las movilizaciones al Congreso se registraron 36 trabajadores de prensa heridos y 4 detenidos.

Por su parte, Juan Pablo Barrientos, de la autogestionada Revista Cítrica relató, a este medio, su vivencia durante la movilización, en donde recibió más de 20 heridas de balas de goma: “Yo había ido a trabajar ese día, tal como me preparé en el 2001, por como habían sido las circunstancias previas y presuponía que iba a pasar algo ese día. Cuando estuve en la calle, me vi en situaciones donde los policías me apuntaban directamente. Por suerte tengo el registro de uno que me tiró, ya que lo tomo con mi cámara. De los otros no tengo imágenes, pero sé que pueden ser dos personas fotografiadas, porque me dispararon por la espalda. Yo me daba cuenta que estaba solo detrás de un árbol y a quince metros los manifestantes y a veinte los policías, y  aún así me tiraban. Por esto ya fui a la Procuraduría de Violencia Institucional a declarar y de ahí, fui a tribunales a que me vea un médico forense. Se verá cómo sigue esta denuncia”.