(Ansol).- Manifiesta es una cooperativa audiovisual conformada desde el 2013, que busca construir a partir de una militancia feminista, con énfasis no sólo en la necesidad de una mayor participación de la mujer en la producción de contenidos, sino también desarrollarse a partir de poner en agenda otras lógicas y reflexiones desde un punto de vista transformador.

“Manifiesta es una cooperativa de comunicación feminista  que busca crear a partir de una mirada igualitaria, que refleje la realidad no discriminatoria, no reforzando los estereotipos, poniendo en agenda otras historias”, dijo a Ansol Julia Zárate, socia fundadora de la cooperativa, y señaló: “Lo que queremos es por un lado promover el espacio de mujeres, y por el otro, promover su participación y las identidades LGTB en la producción como fuerza de trabajo”.

En este sentido, la actividad audiovisual no está ajena a la gran desigualdad entre el hombre y la mujer, que se expresa en todas las áreas de la economía del país: no en vano, el último informe que publicó el Instituto Nacional de Estadística y Censos sobre desempleo, demostró los varones constituyen el 9,2 por ciento del total desocupado, mientras que las mujeres, el 11, 8 por ciento, al tiempo que sobre ellas recaen la mayor parte de la economía hogareña, ya que le destinan a estas faenas 3 horas y 42 minutos más que sus compañeros.

“Según las estadísticas, en las escuelas de cine, radio y televisión, la mitad de las alumnas son mujeres. Pero en el mundo laboral hay un 70 por ciento de varones trabajando. Algo pasa en ese pase a la vida profesional donde las mujeres tenemos menos oportunidades de participar, y se da por un montón de factores: porque también somos madres, somos las encargadas de llevar adelante las tareas hogareñas. Nos hacemos cargo de la economía del cuidado y no podemos tener una vida profesional plena”, afirmó Zárate a esta agencia.

Por último, Manifiesta eligió constituirse como cooperativa, señaló la socia fundadora, no solo como una necesidad de tener entidad jurídica para poder facturar, presentarse a becas y concursos y más, sino también por lo que el cooperativismo implica en términos de trabajo asociado y conjunto, que se adecua perfectamente con los valores que pregonan desde la empresa social: “las cooperativas son un modo alternativo al modo de producción capitalista, donde hay alguien que trabaja por un salario y otro se llevan la ganancia. El cooperativismo es solidario, colectivo, con reglas propias, y va con nuestras ideas políticas, no somos individuos sino un colectivo”, sentenció.

Encuentro de Mujeres Cineastas

Estas jornadas se realizaron dos veces en lo que va del año, en abril y junio, y fue un espacio en el que las mujeres ligadas a la producción audiovisual pudieron reunirse para discutir sus problemáticas y construir una alternativa común de producción.

“Trabajamos en comisiones y tenemos doce proyecto, desde convocatorias para cortometrajes, hasta concursos en el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, una plataforma de contenidos de todas las mujeres, y todo financiado por nosotras como colectivo”, finalizó Zárate a este medio.