El hotel vive bajo amenaza de desalojo, pero esta vez el conflicto se radicalizó, tras el veto a la ley de expropiación que el presidente Mauricio Macri vetó en diciembre pasado, tras la aprobación en las dos cámaras con votos de Cambiemos.

Los trabajadores buscan ahora los votos de dos tercios de los presentes en cada cámara para conseguir la insistencia y rectificar el veto definitivamente.

Así, Ruggeri, también director de la revista Autogestión para Otra Economía, explicó: «El Bauen está en el ojo del Huracán. Es la encricijada de lo económico, lo político, lo social. Es un gran negocio ambicionado por quienes reclaman la propiedad. Es una estafa muy bien armada, ene l corazón del capitalismo argentino. Así como Macri es el ejemplo de la patria contratista, en menor medida, lo es el Grupo Iurcovich. Hicieron grandes negocios con la plata del Estado. Nunca ponen plata. El Bauen es un edificio construido en la dictadura con un crédito dado por la dictadura a través del Banco Nacional de Desarrollo. Jamás pagaron, pero cruzaron el juicio con el de reclamo de retraso del crédito. Así, jamás pagaron. Es lo mismo que hizo Macri con el Correo Argentino».

El autor del libro Bauen. El hotel de los trabajadores agregó que se trata de un modus operandi para acumular capital y remató: «Es el fundamento de la ley de expropiación. Cuando Federico Pinedo y Mauricio Macri dicen en el debate del Senado y en el veto, respectivamente, que no se le puede dar tanta plata a poca gente, se olvidan de que le dieron muchísima más plata a menos gente y que la ley de expropiación dice que deben evaluar el monto de la deuda que Iurcovich tiene con el Estado. No hay que agregar más plata».

Además, resaltó que hay tres empresas en danza pero todas tienen el mismo dueño.

El Bauen realizará mañana una cena solidaria multitudinaria y el miércoles 19 una vigilia en las últimas horas antes de que rija la orden de desalojo de la jueza Paula Hualde.